He decidido hablar de este tema tan extenso por todas las consultas profesionales a cerca del mismo que he tenido, derivadas de personas que, sintiendo gran interés al respecto, no habían encontrado información accesible, ni personal ni profesional, por diversas razones. Me llamó especialmente la atención que el motivo de preguntarme específicamente a mí, fuera que pensaban que, al haber sido yo madre, a favor de la lactancia como se merece, y por mi formación, podría suponer un punto clave para aclarar diversas dudas y miedos, que en muchas ocasiones, ni siquiera se habrían atrevido a preguntar.
Para entender ciertas partes de estos artículos, hay que conocer un poco en qué consisten los procedimientos quirúrgicos. Pero como es un tema científico y por tanto, puede resultar más árido, he reservado los aspectos técnicos para la tercera parte, para que quien no quiera profundizar no requiera leer el total, y voy a intentar explicarlo todo con la mayor claridad posible en las dos primeras partes.
Una circunstancia indiscutible es que para amamantar, tiene que existir glándula mamaria, así que en los raros casos de hipoplasia mamaria severa (no de mamas pequeñas, sino algo severo, patológico, casi ausencia), de aplasia mamaria (que no haya glándula) y por supuesto en la ausencia adquirida de mama (mastectomizadas, mujeres a las que se les ha intervenido para quitarles la glándula mamaria, normalmente por motivos relacionados con el cáncer), podría no ser posible, pero por circunstancias ajenas a la prótesis.
Por otra parte, para salvar los miedos que puedan tenerse sobre el material de que están hechas las prótesis, comentar que hubo un tiempo en que se realizaban con un material que no llegó a poder demostarse de forma clara que no fuera nocivo para la salud en algunas marcas. Estas prótesis hace muchísimos años que no se ponen. Hoy día tenemos prótesis con cubierta de poliuretano, de las que no he encontrado estudios específicos, y con cubiertas de silicona. La silicona en ningún caso supone un problema para la lacancia. En otras entradas hablaré del tema en más detalle. Todas las prótesis cumplen las rigurosas exigencias sanitarias en España, y aunque es cierto que se producen fallos de filtro como el terrible caso de las PIP, se puede afirmar que éste es un hecho completamente excepcional.
Aunque hay pocos estudios específicos, porque parece que a los que los encargan o financian, éste no es un tema que les quite el sueño, de entrada todas las vías de abordaje y bolsillos son compatibles con la lactancia, y se debería animar a las pacientes a iniciarla.
Son casos muy particulares y que requieren de delicadeza y, por qué no, de una sensibilidad especial, así que, como cirujana, como médico, y especialmente como madre, pienso que en estos momentos no se debería escatimar el seguimiento y el consejo profesional a nuestras pacientes en tantos momentos como nos sea demandado. Entendiendo que hay vías de abordaje para la intervención de aumento mamario que tocan o seccionan más o menos parte de la glándula, resulta fácil entender que esto puede tener distinta influencia en la posterior lactancia.
En las vías de abordaje que seccionan el parénquima mamario y a través de él permiten el paso de la prótesis, como son las incisiones en la areola o periareolares, se realiza una distorsión cicatricial en el interior del parénquima mamario que puede alterar el paso al flujo normal de la leche. Sin embargo, aunque no está estudiado para el aumento mamario, sí lo está para la mamoplastia de reducción, y parece que es posible que se produza la recanalización de los conductos cortados. Aunque no ocurriera, con el resto de tejido mamario estaría asegurada la producción. Otro inconveniente es que es más fácil que la prótesis se llene de microbios al ponerla por esta vía, pero esto es independiente de que haya o no lactancia, no ocurre después de que todo haya cicatrizado, sino recién operada. El último detalle a comentar es que como para generarse el reflejo de eyección de la lactancia, uno de los factores influyentes es la sensibilidad del pezón, si ésta se altera puede influir (pero todo esto es teórico y muy relativo, el reflejo de eyección se puede producir sólo por pensar en tu bebé, así que fíjate si es una cuestión cerebral y mental).
En las vías donde se respeta el parénquima mamario (salvando que alguna parte de la prótesis pueda contactar con él), se respeta por completo el sistema canalicular y glandular, la sensibilidad y el riego, y por tanto, la fisiología mamaria. Por este motivo, esta es mi vía de abordaje favorita, siempre que sea posible. Otro gran beneficio es que al no cortar el tejido mamario, no se producirán en él cicatrices que luego puedan dificultar el diagnóstico precoz del cáncer de mama.
Gracias por tu sensibilidad y por la sencillez para definir algo dificil de entender para las personas ajenasa a la cirugia plástica.
Espero que ayude a muchas madres con deseos de amamantar.
Gracias de nuevo.
Buenas me alegra ver estos temas por aquí hace dos años nadie me podía ayudar con lo mío y tuve que acudir a Libros estafinidenses para más información sobre la lactancia tras operación de pecho. Yo tengo una mamoplastia de aumento pero donde también me redujeron a piel sobrante así q trabajaron via areola. Mi principal problema fue a nivel nervioso, reflejo de eyección y posteriormente de producción, tube que ayudarme de leche artificial pero siempre a aba con un relactador unca biberon, a partir de los 6 meses ya no me hizo falta y ya van 26 meses de lacancia
Querida Doctora Aguayo, es un honor y un orgullo para mi, que la Neonatóloga experta en lactancia, coordinadora de la guía de lactancia para profesionales, que tanto me ayudó, con tu valiosísima trayectoria profesional y personal, se sienta interesada por mis artículos. Gracias a ti Pepa.