Lo más importante a la hora de hacerse una cirugía plástica es que el paciente tenga expectativas realistas del beneficio de la cirugía, así como conocimiento de los posibles riesgos.
Muchos de los problemas de satisfacción de los resultados de una cirugía plástica que se generan después de operarse son porque las expectativas, lo que se espera, no son acordes a los posibles resultados de que se podrían obtener.
Tips para saber qué esperar de tu cirugía plástica
- Valora tu caso como único e irrepetible: Muchos pacientes acuden a consulta con expectativas irrealistas y preconcebidas de la cirugía y de los resultados a conseguir construidas en base a la experiencia de otras personas que ya han pasado por un proceso similar y a la información recabada en internet. A veces esas ideas son, además, inamovibles. No puedes pensar que el consejo que te está dando el profesional se mantiene ajeno a tus deseos, solo que está evaluando tu caso de manera individualizada, incomparable a otros.
- Confía en tu cirujano plástico, escúchalo y exprésate con sinceridad: La comunicación médico-paciente es fundamental para la satisfacción de los resultados de una cirugía. Cuando acudís a consulta es importante que me informéis sobre vuestros deseos sin tapujos, que me contéis con sinceridad qué os gustaría conseguir, qué sabéis sobre la cirugía en cuestión, etc. De esta manera os explicaré qué se puede hacer y qué no y si vuestros objetivos son alcanzables. Hay pacientes que acuden con deseos infinitos y a la vez limitaciones: quiero elevar el pecho pero sin una cicatriz en T. Cuando planificamos un caso, siempre estamos pensando en conseguir la mínima invasividad para alcanzar el resultado que se quiere. Hay determinados resultados que no se pueden conseguir sin correr algunos riesgos o aceptar ciertas secuelas como las cicatrices y la posibilidad de que estas sean más o menos estéticas sin depender de la pericia del cirujano plástico, sino sometidas a la impredictibilidad del cuerpo de cada uno.
- Huye del concepto de perfección: cuando hablamos de lo que debemos esperar de una cirugía plástica, tenemos que pensar en que vamos a mejorar, pero no debemos buscar la perfección, ya que esto es un concepto muy subjetivo y poco alcanzable.
- No dejarse influenciar por la opinión de los demás: me he encontrado varios casos donde el o la paciente quería una cosa y pedía otro resultado impuesto por otras personas que no eran él o ella. Esto tiene un significado mucho más profundo, pero tu cuerpo es tuyo y de nadie más y debes ser solamente tú quien decida sobre el.
- Pensar que el cirujano plástico siempre se pone en lo peor: cuando un cirujano plástico acepta un caso en su consulta privada, lo está haciendo de manera completamente libre y convencido de que existe margen de mejora, pero siendo también conocedor de las complicaciones que pueden surgir. Veo constantemente pacientes que no quieren leer los consentimientos informados o que replican ante los riesgos con un “no me va a tocar a mi”. Tienes que pensar que a nivel de marketing, es mucho más efectivo afirmar rotundamente que todo va a salir bien, pero eso es poco ético y va en contra de la vocación médica. Cuando detallamos las posibilidades que existen en una operación de cirugía plástica o estética, estamos intentando que el paciente ponga en una balanza los beneficios potenciales y los riesgos potenciales para tomar una buena decisión.
Ser sincero con tu cirujano plástico y hablar sin tapujos y dejarte asesorar por un especialista en la materia es la clave principal para que ambos salgamos contentos de la experiencia de realizarte una cirugía plástica.