Hoy día, el siglo XXI, el siglo del que se hablaba como futuro y que ya es presente, inmersos en plena cuarta revolución industrial con la inteligencia artificial, la realidad virtual, el ser humano ha cambiado mucho. Esta revolución tecnológica nos ha traído innovaciones radicales que marcan y definen nuestra sociedad, transformando hábitos, estilos de vida y creencias y pensamientos.
Si nos referimos a cómo la tecnología nos facilita la vida, hemos cambiado a mucho mejor. Ya no podría imaginarme operar en un quirófano de los de hace 30 años. Pero si entramos en materia intangible, en concreto en la de la mente y la de las motivaciones que impulsan a las personas a actuar, la cuestión en bien distinta, no sé si ha sido una evolución positiva o negativa.
Sobre todo, cuando puntualizamos en términos tan contrapuestos pero al mismo tiempo tan complementarios como la reconstrucción y la estética en cirugía plástica.
Porque ¿Cuáles son las motivaciones que llevan a una mujer a querer cambiar estéticamente?¿Por qué se operan las mujeres?¿Porque está sometida a una sociedad del patriarcado?¿Para gustar a los demás?¿Para gustar a los hombres?
Y no me refiero a quien se opera porque tiene las mamas tan grandes que le duele la espalda, ni a aquella otra que se opera porque no se le ha desarrollado en absoluto su glándula mamaria o a las que tienen mamas tuberosas. Apunto a esas mujeres libres de patologías descriptibles, es decir, personas normales que no precisan de ninguna cirugía reconstructiva para reparar cualquier parte de su cuerpo y que están motivadas puramente por la estética. Cambiar para mejorar.
Existen dos visiones holísticas sobre este tema de controversia. Dos caras de la una misma moneda con detractores y defensores de una realidad tan subjetiva como ajena.
Por un lado, la corriente más crítica propone como premisa una objetivación de la mujer o cosificación sexual: la mujer como objeto de consumo. Afirman que la historia misma la ha sometido de tal manera a “querer gustar” principalmente a los hombres, que ese el origen de que las mujeres decidan operarse sin necesidad patológica, por mejorar estéticamente para adaptarse a los patrones de belleza que atraen a los hombres.
Si echamos la vista atrás, observamos pautas que se repiten en nuestra sociedad, como por ejemplo el uso del corsé en la época victoriana. La utilización de esa prenda femenina provocaba daños en vísceras internas y causaba patologías importantes. Hablamos incluso de mortalidad precoz, osea había un aumento de la mortalidad por llevar corsé, y sin embargo, esto se hacía porque la sociedad en aquel entonces en el siglo XIX, lo dictaba así. Es una opinión respetable, y seguramente en algún momento de la historia ha sido la correcta, las mujeres siempre han cambiando su aspecto como un efecto de la opresión que han tenido por parte de los hombres. Ahora bien, esto es una opinión que cada cual puede tener, y la que expongo aquí, por supuesto, solamente es la mía y seguramente habría que individualizar cada caso para saber por qué se opera una mujer.
No se puede generalizar, pero hay otra corriente de pensamiento en cuanto a este tema: ¿no podemos pensar que las mujeres se operen por liberación? En el siglo XIX la mujer no podía decidir si llevaba o corsé o no, porque si no llevaba corsé era ir en contra de unos patrones sociales fuertemente arraigados, era ser una rebelde y seguramente se la diagnosticaría de histeria y se le quitaría el útero quirúrgicamente en una condiciones nefastas con unos altos riesgos de mortalidad y si sobrevivía, en los pocos casos de que sobreviviera, la trataran de histeria incurable dentro de un psiquiátrico hasta que muriera. Creedme que no exagero.
En mi opinión y coincidiendo con la segunda visión sobre cuáles son las motivaciones de las mujeres para someterse a un procedimiento quirúrgico estético, la mujer de hoy día es consciente de sí, y el hecho de que le guste a más o menos personas no te condiciona la vida tanto como antaño, no hace que no te admitan en un trabajo, que no tengas pareja o que no vayas a poder reproducirte. Que esto ya no es como las que mujeres que si pasaban de cierta edad ya no se casaban. Que hoy en día la mujer puede casarse y tener pareja teniendo mamas voluminosas o sin ellas, teniendo glúteos prominentes o no. Es decir, esta sociedad ya no es tan limitante, eso quedó para otros tiempos, hoy día puedes mostrarte como te apetezca, presentar una estética u otra, somos libres de elegir cómo queremos mostrarnos ante los demás.
Entonces ¿por qué seguimos pensando que hoy en día sigue existiendo la opresión de tiempos atrás?.
¿Realmente en la actualidad la mujer siente la necesidad de cambiar estéticamente para gustar al hombre? Yo creo que no. Yo pienso que la mayoría de las mujeres no se cambian estéticamente para gustarle los hombres, se cambian simplemente porque quieren cambiar. ¿Y por qué quieren? Bueno pues eso ya habría que preguntárselo a cada una, pero no creo que el motivo principal sea gustarle a los hombres.
Aunque con matices, es cierto que cuando cambias ciertas cosas de ti misma en ocasiones es para gustarle a cierta persona, pero me refiero a la cirugía plástica en un ámbito más íntimo, y no de la exposición pública como exhibición a los demás. ¿Qué hay de todas las mujeres que no se miran al espejo porque no se ven bien y que solo se están viendo ellas mismas? Porque esto a lo mejor la sociedad no lo sabe, pero yo sí lo sé, porque ellas vienen a mi consulta y me lo cuentan. Hay muchísimas mujeres que no se miran al espejo, que no se ponen bañadores, estando solas, sin más ojos juzgantes que los de ellas mismas. Mujeres que no se compran ropa interior porque se sienten mal, pero consigo mismas, independientemente de que tengan pareja o no, muchas de ellas incluso tienen parejas que se oponen a que operen porque no lo ven necesario, las ven perfectas. ¿Por qué se está operando esa mujer si su marido le está diciendo que le gusta tal cual que no se opere?¿Por qué se opera esa mujer? Se opera por sí misma, porque quiere y porque así lo ha decidido ella misma.
De esas mujeres que dicen que se operan por que quieren si se les pregunta mas a fondo probablemente no sepan describirlo o terminen con el mismo paradigma de gustar a los demás, sean hombres o mujeres. Antes de decidir cortar su cuerpo y las posibles consecuencias de que con ello lleva, la atención psicológica es clave. Y no es por algo que la mayoria de las que se operan son Latinas, donde mucho de la cultura, educación y estereotipos son diferentes y muy marcados a la violencia hacía la mujer.
Hola Ruperto, gracias por aportar tu visión. Obviamente los cánones y la presión social afectan en la forma en la que nos vemos a nosotros mismos y por tanto en el nivel de autoestima del que disfrutamos para afrontar nuestras relaciones con el entorno y con los demás. Los factores culturales influyen aunque no sabría decirte si las latinas se operan más o no que otras razas porque para hacer esa comparativa habría que estudiar todas las variables como el acceso a este tipo de servicios (por el precio), el funcionamiento de la sanidad pública y la cobertura o no de determinados procedimientos, etc. sin embargo, lo que si puedo decir desde mi experiencia es que se de primera mano que hay lugares en los que todo versa entre la vida y la muerte, pero desde luego no es el caso de Europa. Hay mucha gente que quiere mejorar, que quiere ser más bella, para ser más feliz (en parte por su relación con los demás y en parte por su relación con ellos mismos). Tener un coche más grande o bonito, gozar de más agilidad para hacer deporte o disfrutar de más tiempo libre son unos buenos ejemplos para comparar. Saludos.